Adultos Mayores

Un estudio efectuado por la Superintendencia de Salud reveló que el gasto en salud en el adulto mayor podría cuadruplicarse y pasar de casi 500 mil millones de pesos en el año 2002 a cerca de 2 billones de pesos en el año 2020.

Esta investigación, denominada "Impacto del Envejecimiento en el Gasto en Salud: Chile 2002-2020", llama a reflexionar respecto de cómo se expresarán las proyecciones de población a futuro, su perfil epidemiológico y cuáles serán los principales componentes del gasto: magnitud y tendencias en el mediano y largo plazo.

En efecto, dentro de las conclusiones de este estudio aparece que Chile presenta un proceso de envejecimiento acelerado: el 2020 un 17,3% de los chilenos (3.207.729 hab.) será mayor de 60 años; el 7,5% de los Adultos Mayores en Chile son pobres o indigentes (CASEN 2006), que el 50% del gasto en salud de los Adultos Mayores -unos $250 mil millones-, corresponde a Hospitalización, el que en el año 2020 será 2,5 veces mayor y que, como se ha mencionado, las estimaciones indican que el gasto en salud se podría cuadruplicar.

Ahora, por un lado se podría pensar que un proceso de envejecimiento acelerado es una buena noticia, porque se están generando las posibilidades de qué vivamos más años en nuestro país. Pero, sin lugar a dudas este fenómeno invita a todos lo sectores involucrados a generar instancias para que estos años sean de mejor calidad y por eso debemos prepararnos para el futuro.

Esto, porque el 31% del aumento del gasto señalado, se explica por el alza de la población adulta mayor, pero el otro 59% dependerá especialmente de factores no demográficos, como por ejemplo la calidad de vivienda, la obtención de una pensión digna, la mantención de una alimentación y conductas saludables. También de la posibilidad de acceder a lugares de esparcimiento, realizar ejercicios físicos, tener una mayor formación cultural para activar el desarrollo mental y prevenir patologías como la depresión y el Alzheimer, etc. Esto, significa que la demanda de salud depende, principalmente, del estado de salud y no de la edad per se.

De esta forma, se abren una serie de desafíos como sociedad toda para tomar conciencia que desde ya que hay que cambiar las conductas y hábitos para llegar a una vejez autovalente, generar estrategias potentes que promuevan Estilos de Vida Saludables en etapas tempranas del ciclo de vida y evaluar la factibilidad de implementar Sistemas de Seguros de Cuidados de Largo Plazo en nuestro país.

En relación a lo anterior, en el Sector Salud aparecen las Garantís Explícitas en Salud (GES) o Plan AUGE, dado que este instrumento de acción sanitaria contempla, dentro de los 56 problemas de salud garantizados, 7 para este importante segmento de la población, los que son: Endoprótesis total de Caderas; Neumonía Adquirida en la Comunidad (NAC) de manejo ambulatorio; Vicios de Refracción en personas de 65 años y más (entrega de lentes); Órtesis (o ayudas técnicas) para personas de 65 años y más (considerando sillas de ruedas, bastones, andadores, cojines y colchones antiescaras); Tratamiento médico en personas de 55 años y más con artrosis de caderas y/o rodillas, leve o moderada; Salud oral integral del adulto de 60 años e Hipoacusia bilateral en personas de 65 años y más que requieren uso de audífono.

La utilización de las GES o AUGE para el tratamiento de estas condiciones de salud recién mencionadas puede generar una serie de discusiones, entre otras relativas a que no están todas las patologías, a que no se garantizan todas las prestaciones que son efectivamente necesarias o que se limita el acceso a una determinada edad, cuestión que es muy legítima. Lo que si, a mi entender, esto es un avance, que en algo puede ayudar a mitigar los efectos del inexorable avance de la edad y de establecer algunas alternativas para que este trance sea mejor.

Como otras veces lo he platenteado, si usted desea mayor información al respecto, puede navegar en los sitios web www.superdesalud.cl o www.minsal.cl, o bien visitar las dependencias de la Agencia Región de Tarapacá de esta Superintendencia, ubicadas en Serrano N° 145 (Edificio Econorte), Oficina 202, Iquique.